domingo, 25 de mayo de 2008

Bondis del barrio - Línea 132



Hoy, 25 de mayo, les presento una línea porteña que brinda el mejor servicio de la ciudad. Muchos coches, buena frecuencia, buen mantenimiento, todos coches modernos, todos con cartelera led, servicio de inspectores en paradas más importantes, choferes, en general, correctos.
En esta fecha patria, como es feriado me pude hacer un tiempo para postear y hablar más en profundidad del (o de los) propósitos de este blog. Muchos dirán, ¿éste para qué habla tanto de bondis? Bueno, es que el colectivo es el medio de transporte público que más representa a Buenos Aires, y a cada barrio, aunque, como ya adelantara, la identidad del barrio con los bondis se ve cada vez menos presente por varios motivos. Seguramente es menos rápido (aunque mucho menos costoso) que el subte, pero es justamente vital para una ciudad que no dispone de una red de subte extensa e integrada.
El transporte es el elemento articulador del espacio urbano (aunque no sólo, pero ese es el que nos interesa aquí) por excelencia. La sociedad actual (por lo menos la argentina, eminentemente urbana) construye y reproduce su espacio mediante el trabajo acumulado de manera que el paisaje urbano es el resultado perceptible de los trabajos acumulados de la sociedad (con todas sus diferencias entre sectores socioeconómicos) sobre su espacio, dado de antemano como base natural, física.
En la capital argentina esa base biofísica era una llanura cubierta de un pastizal con suaves ondulaciones sobre la costa de un río muy ancho con ciertas características hidrológicas particulares (con pulsos de inundaciones determinados por el nivel del río, la dirección, frecuencia e intensidad de los vientos, como la sudestada, y la frecuencia estacional, duración e intensidad de las precipitaciones)
Desde su segunda fundación hasta hoy, Buenos Aires se convirtió físicamente en una gran zona metropolitana de 13 millones de habitantes, cuya jurisdicción central, la Ciudad Autónoma, concentra la mayor densidad de redes de transporte del área.
Es cierto que estamos atrasados en materia de transporte con el resto del mundo, y me gustaría que esa realidad fuera diferente, y tal vez poder participar de ese cambio.
Todos queremos una ciudad con transporte de calidad (la línea 132 lamentablemente es uno de los pocos casos en que esto es así) e integrado según las demandas de viajes de los usuarios. Así, los puntos de transbordo entre distintas líneas (ya sean entre las de un mismo tipo o multimodales, como de tren a subte, o de subte a colectivo) deben estar pensados estratégicamente para minimizar los tiempos de viaje y disminuir los malestares que aquejan hoy en día a quienes usan el transporte para trabajar, estudiar, ir al médico, o lo que sea.
El desarrollo de nuevas tecnologías de transporte permitió la expansión física de la metrópolis desde fines del siglo XIX (el tranvía eléctrico, el auto, el subte, etc.), al acortar las distancias relativas (en función del tiempo por la variable velocidad), permitió que las distancias absolutas, físicas, calculables sobre un mapa, se extendieran junto a la ciudad sobre el campo abierto captando otros centros urbanos menores, invadiendo municipios vecinos y subordinando a su órbita económica ciudades antes más distantes (Pilar, Zárate, etc.)
En esta gran ciudad, el transporte automotor de pasajeros se organiza según líneas con recorrido fijo y puntos extremos definidos. Cuáles sean esos puntos y cuál sea el recorrido es escogido sobre todo con criterios económicos. Veamos:
Centralidad de los puntos extremos, centralidad quiere decir accesibilidad a mayor cantidad de servicios y por ende, mayor cantidad de gente que necesite viajar hasta ahí para utilizarlos o para trabajar en ellos.
Densidad poblacional de las áreas que recorran, obviamente, un recorrido por zona de quintas va a tener menos demanda que uno que vaya de Constitución a Belgrano.
Conectividad con otros medios de transporte, ya sea en puntos extremos o en cualquier punto del trayecto. Una línea que no se cruce con ninguna otra (esto puede no ser tan así en ciudades muy pequeñas, de 10000 habitantes ponele) va a tener menos éxito que una que integre varios nodos de transbordo. Así, muchas líneas de colectivos creadas en los años 40 salían de estaciones de subte. Esto nos lleva al siguiente punto.
Competencia con otras líneas (del mismo rubro o no), así empezaron los colectivos señores, haciendo el mismo recorrido que los tranvías y absorbiendo parte de sus pasajeros. Es lo que ahora también hacen los truchos de Constitución, atrayendo demanda mediante el precio (obviamente más bajo que un bondi legal).
Forma del recorrido. Esto es, la direccionalidad, lo opuesto a "vueltero". es decir, una línea vueltera no lo es por capricho de los directivos, sino para absorber la mayor cantidad de demanda posible. En nuestra ciudad hay varias líneas que no unen sus extremos directamente, sino en forma de "medialuna", ya que por lo general hay otras líneas que van directo, o hay una demanda de traslado tan escasa entre esos puntos que es más conveniente absorber mayor demanda aumentando el kilometraje (ejemplo clásico, el 110). Esto, desde luego, perjudica a mucha gente que justo tiene una demanda "poco rentable" para esa línea, sufriendo mayor tiempo de viaje.

Ahora vemos cómo se aplica todo esto al 132.
Este bondi va de Retiro (nodo central de toda la metrópolis, estación terminal de tres ferrocarriles, ubicación de la terminal de ómnibus con destino a todo el país, cabecera de un subte que se cruza con todos los demás, y terminal también de decenas de líneas de colectivos, como así también, zona densamente poblada y próxima al puerto) hasta el Cementerio de Flores (zona relativamente periférica por su densidad, pero próxima a un subcentro muy importante, la Plaza Flores). Su trayecto es directo (últimamente más por la disposición de semáforos con giro en todo punto donde cambia de avenida hacia la izquierda), corto (12 km.) y pasa por avenidas céntricas (Córdoba, Pueyrredón) con fuerte demanda hacia subcentros igualmente densos (Primera Junta, Flores), en un tramo pequeño compite con el subte A (de Once a Primera Junta), pasa por otro nodo neurálgico de transbordo (Once). La demanda de esta línea es tan fuerte que en horarios centrales, sobre Córdoba, todos los colectivos van bastante llenos, aunque pasen a cada minuto. Aunque tampoco hay que perder de vista que muchas veces el transporte crea demanda además de satisfacerla.

Como he dicho antes, esta línea pertenece a una empresa independiente, más o menos pequeña pero poderosa (unida empresarialmente con DOTA), que al parecer se esmera en la prolijidad (casi todos los coches iguales, Metalpar). La decoración y el "armado" de los coches están limitados, a fin de conservar una presentación ante el usuario sobria.
Como si todo esto fuera poco, este año incorporó a su holgada flota una unidad articulada experimental (en la cual afortunadamente viajé pero no tenía la cámara), interno 118.
Así que, esto fue una pequeña fundamentación de por qué hago este blog. Me dio mucho placer escribir esto, para presentar una línea que es especial para mí, que tomo desde la infancia, es la que más tomé lejos y casi nunca me falló. La 132. NUEVOS RUMBOS.

PD: Lo que sí, a pesar de todo nada es tan maravilloso, el otro día iba en un 132 y cuando doblaba de Carabobo a Rivadavia se paró en medio del giro, sobre la senda peatonal para hablar con otro chofer de la línea 2 (encima cerca del inspector), o sea, cero responsabilidad por parte del chofer. Quiero pensar que capaz era por algo urgente, vayan a saber.
Por último, me parece que la campaña por los carriles exclusivos que reclaman los colectivos es válida, si se implementa y respeta como debe ser, desde luego. Pero, lo que sí me parece deplorable es que esa campaña vaya acompañada (y esté justificada) mediante bardeos al subte: "Dejá los túneles para los topos" "El subte tiene moderna jazz band, nosotros sólo reclamamos carriles exclusivos". O sea, esto aumenta más la confusión en la gente y tiende a sectorializar el transporte, cuando esa postura, hoy en día me parece que es muy retrógrada porque el transporte debe ser integrado y articulado en sus diferentes modalidades. Creo que los carriles exclusivos no tienen nada que ver con un boicot al subte. El subte se puede extender (y sobre todo integrar) o aumentar su demanda y también puede haber carriles exclusivos para agilizar el tráfico de bondis. No son excluyentes esas dos cosas, de hecho, la gente que toma subte no va a dejar de hacerlo porque se acorte el tiempo de viaje en los bondis gracias a los carriles exclusivos. Los que idearon esa propaganda deberían haber tenido en cuenta eso.

Muchas gracias.
Hasta la prochaine.

lunes, 12 de mayo de 2008

Bondis del barrio - Línea 7


Este posteo va a ser breve porque no tengo mucho contacto con esta línea.

Por lo que sé es una de las tantas líneas que forman parte del pulpo dotense, aunque con color azul en vez de verde, ya que su razón social no es DOTA sino la de su ex-prestataria "12 de octubre" (creo que alguna vez tuvo que ver con la 26, al tener también el nombre de una fecha y colores similares). En efecto, su anterior corte cromático era una serie de líneas azules con fondo blanco. La vieja empresa quebró a fines de los 90 cuando fue tomada por la empresa Gral. Roca (líneas 21 y 108), pero luego, como esa empresa había entrado en una unión con Expreso Caraza para administrar la 146 (ROCARAZA) y encima también quebró Caraza, la 146 quedó en manos de Dota que también estuvo en condiciones de afrontar los costos de apropiacón de la caída línea 7.
Hoy en día el servicio creo que es decente. Desde el año pasado vino incorporando bastantes Metalpar con chasis Agrale, todos iguales y aburridos, así como cortos y poco espaciosos (como el ejemplo de la imagen, interno 1425). El resto de la flota todavía está compuesta por El Detalle (casi todos de tercera generación).
El recorrido es muy corto (Retiro-Parque Avellaneda) así como raro, pasa por el Hospital Piñero por la calle Avelino Díaz y baja luego por Emilio Mitre, después Asamblea, La Plata, barrio de Boedo, Hospital Español, Once, Congreso, Retiro.
Puede pensarse que ese trayecto es poco original (compite con muchas otras líneas), pero, por ejemplo, es la única línea que une directamente la calle Asamblea con la estación de Once.
De los bondis que publiqué hasta acá es el que menos conozco (lo tomé una sola vez).

La próxima, publico una línea que, por el contrario, debe ser lejos la que más tomé en mi vida, aunque no penetre en el barrio Parque Chacabuco, sí lo bordea por su límite occidental, la Avenida Carabobo. El 132.